21-03-2010 Intento de ir a "El Galeon"

En breve el relato (ver fotos).

27 y 28-02-2010 Paseo por el delta con Lucas

En la semana había coordinado con Lucas para ir a remar el finde por el delta, aprovechando que estaba la luna llena le tire la onda de pasar la noche acampando en la isla. Y así fue.
El amanecer del día sábado fue con una pequeña tormenta, lo que me desmotivo un poco porque pensé que el día iba a estar nublado y feo, pero por suerte no fue así.

Llegue a la rampa del hispano a eso de las 10 hs. Ahí me encontré con Lucas y su gente, que estaban preparando los kayak para salir. A eso de las 11:30 hs. ya estábamos todos en el agua.

El grupo estaba comprendido por: Mónica, Vicky, Guadalupe, Claudia, Jaki, Gabriel, Rubén, José Luís y Guillermo (los psiquiatras, va no me quedo en claro si son psiquiatras o van los dos al mismo psiquiatra, jaja), Lucas y yo.
El destino era el parador de "El Indio" este parador se encuentra sobre el arroyo El dorado. Para llegar a este parador hicimos el siguiente derrotero:

Río Lujan, hasta llegar a un barco hundido llamado "Don Rogelio C" al pasar este barco hay un zanjon que nos llevo hasta el Abra vieja, luego ingresamos al Arroyo Gutiérrez, para salir al Canal Vinculación, de este canal ingresamos al arroyo Pajarito y luego al arroyo Correa, que nos dejo en el Río San Antonio.

Al llegar a la desembocadura del Correa nos encontramos con un islote de camalotes que nos tapaba la salida al San Antonio, tuvimos que hacer unos metros entre los juncos para poder salir.

Luego de ese altercado, ingresamos en el arroyo El dorado y llegamos a nuestro destino a las 13:15 hs. Ese recorrido fue de un total de 10 km.

Una vez en lo del indio, ya la muchachada empezó a degustar algunas cervezas, las chicas en cambio para cuidar sus siluetas optaron por gaseosas light, jaja.

Luego el hambre nos empezó a llamar y pedimos una picada, para luego acompañarla con sándwiches de milanesa y de hamburguesas, Gabriel en cambio se trajo un sándwich de lomito.

Ya todos pipones nos dedicamos a charlar y a tomar un poco de sol, la tarde estaba espectacular.

Luego de descansar al sol, Mónica saco una torta que había preparado para acompañar los mates, mientras tanto Lucas y Gabriel se entretenían en el muelle sacándole fotos a una "hortensia" que se encontraba arriba de un crucerito.

En una vemos venir desde el muelle a dos chicos que estaban medios tomados ya, habían bajado a comprar unas latas de cervezas. Cuando se están yendo vemos que no había ninguna embarcación en el muelle, habían venido en un inflable, jaja, los locos venían a tiro, haciéndole "dedo" a toda lancha que pasaba para que los lleve, unos capos los pibes.

Emprendimos la retirada a las 17:30 hs. la vuelta la hicimos por el río San Antonio, río Sarmiento y arroyo Gambado. A las 19 hs. ya estábamos desembarcando en la rampa del hispano.

Mientras Lucas guardaba los kayaks, me puse a cargar el mío con todos los bártulos para ir a pasar la noche en el Pehuen. En la rampa me encontré con Agustín, uno de los tres chicos que hizo la súper travesía de La Quiaca a Ushuaia.

Muy linda sorpresa me lleve cuando me reconoció, (a ellos los había visto por el mes de Julio del 2009 cuando estaban realizando dicha travesía y habían parado en el Club Regatas de La Plata, en el Río Santiago),

También me encontré con Néstor "El vikingo" Rasiak y Andrés Koch, ellos estaban preparando los botes para salir rumbo a Montevideo Uruguay, para ir con todas las pilas, entre todo sus equipajes llevaban un buen whisky, jaja (dura la vida del kayakista).

En la rampa había mucho alboroto de gente, porque como era una noche de luna llena, muchos no se querían perder la oportunidad de remar esa noche. Esperamos que se desocupe un poco el lugar, mientras tanto Lucas aprovecho y saco un par de fotos espectaculares a la luna.

Salimos de la rampa a las 20:10 hs. Empezamos el recorrido por el arroyo Gambado, al ingresar en este arroyo, ya no se distinguían bien a los remeros que lo transitaban, Lucas saludaba a la gente, que se aproximaba sin llegar a verle las caras, los conocía a todos por su forma de remar, en ese arroyo nos cruzamos con el Hippie que nos comento que en el Pehuen estaba el 22 (un personaje de la ostia!!!), luego nos cruzamos con el Pulpo, lo invitamos a que venga con nosotros pero tenia un compromiso y no pudo acompañarnos.

Luego del gambado, tomamos por el Sarmiento, ahí nos encontramos con un grupo de kayakistas de la escuela "Delta en kayak", nos agrupamos con ellos y fuimos remando hasta el arroyo Espera Grande, luego ingresamos al arroyo de Las Gaviotas, ahí había una oscuridad absoluta, solo se podía ver por los pocos rayos de la luz de la luna que traspasaban las ramas de los árboles, empalmamos el arroyo Rama Negra y luego el río Capitán, que nos llevo hasta el Pehuen.

Allí nos encontramos con Ricardo "El 22", ya nos estaba esperando con un tinto a la luz de la luna y al borde del río, una muy buena recibida si las hay, jajaja. Lucas le fue a preguntar a Mari que había para cenar, y nos preparo unos ravioles tremendos!!!!!.

Mientras Mari nos preparaba la cena, nos pusimos a armar la carpa debajo de un árbol. Los ravioles los comimos al aire libre, bajo la luz de la luna y a la orilla del río, la noche estaba espectacular!!!!. Luego de la cena nos quedamos charlando un poco de todo un buen rato, no daban ganas de irse a dormir.

El día domingo, amaneció espectacular, Lucas le aviso a Mari que ya estábamos levantados para que vaya preparando el desayuno, mientras tanto, Horacio, el marido de Mari, estaba terminando de arreglar un botecito, Ricardo ya se había levantado y estaba acomodando todos los bártulos. Al rato llega Mari con los café con leche y al nene mimado (Lucas) le trajo el café con leche en un flor de tazón. Todo esto estaba acompañado con pan, tostadas, mermelada y manteca, estaba todo riquísimo!!!.

Luego del desayuno explosivo, nos pusimos, desarmar la carpa y guardar todo, como todavía faltaba para el almuerzo, Ricardo se apareció con una cerveza y eso nos motivo a decirle a Mari que nos prepare una picada, no mucho porque sino no íbamos a poder deleitar los ñoquis del almuerzo. Mientras terminábamos la picada me puse a repararle el kayak a Lucas que de tanto arrastrarlo se le había roto la popa del mismo y le entraba agua en el tambucho trasero, así que nos pusimos manos a la obra con esa reparación. Ricardo mientras tanto entablaba una conversación un tanto extraña con el loro “pepe”.

Al rato llega Mari con la gran bandeja de ñoquis, Ricardo como buen bebedor, trajo de la despensa un buen tinto para acompañar esa exquisitez. Cuando estábamos devorando nos dimos cuenta que Horacio estaba haciendo un chancho salvaje a la parrilla que se lo había traído un lanchero del Paraná. Dejamos de tomar un poco de vino, para luego degustarlo junto con el chancho (como podrán apreciar, la estábamos pasando muy mal, no?). Al terminar de cenar, Horacio trajo el motor para ponerle al botecito, y luego lo estuvieron probando con Ricardo, ese bote más que bote era un avión de cómo andaba, jajaja.

Partimos del Pehuen a las 17:05 hs. Con rumbo a un parador que esta sobre el río Sarmiento llamado Cabo Blanco, el recorrido que realizamos fue el mismo que hicimos para llegar al Pehuen, tras 1:15 hs. de remo llegamos a dicho lugar. En este lugar estaba Eladio, El hippie, Pancho y Lujan. Con Ricardo nos quedamos charlando ahí con la gente, mientras Lucas barrenaba y rolaba con las olas que producían las lanchas, el río estaba muy crecido. Dejamos Cabo Blanco a las 19:30 hs. en esta vuelta se nos sumo Lujar y Pancho, que también volvían hacia el hispano, llegamos a la rampa a las 20:00 hs.
Mientras los muchachos guardaban sus botes, yo me puse a meter todo adentro del coche y atar el kayak, al rato cae Lucas y me dice que se iban a juntar en “La draga” un resto-bar. que estaba a una cuadra del club hispano, como no tenia muchas ganas de volverme para mi rancho me fui ese lugar. Al llegar, nos encontramos con Teresa y Ernesto, un matrimonio kayakista con el cual compartimos la mesa, mas tarde llego Ricardo y se sentó junto a nosotros. Entre charlas y anécdotas que nos contaba Ernesto sobre sus travesías por el sur, entre otras, llego la hora de mi partida. Me despedí de la muchachada con un HASTA LUEGO porque pienso volver a compartir otro fin de semana tan espectacular como este.

(ver fotos) (fotos sacadas por Lucas)